¡Gracias!
Con la distancia del tiempo toca reflexionar y valorar lo ocurrido el pasado 27 de mayo en el Monasterio de Montederramo.
Como ya hemos dicho, en repetidas ocasiones, ACIGAL está integrada por distintas entidades y algunos voluntarios que únicamente buscan revitalizar el patrimonio cisterciense a través del llamado Tercer Sector, como vía de gestión alternativa que no implica a la iniciativa pública ni a la privada en exclusiva, si no a las dos en conjunto, y cuyo objetivo no es el de producir beneficios económicos particulares, si no un beneficio general para la sociedad.
El pasado viernes 27 de mayo en Montederramo, tuvimos la suerte de conocer, en unos casos, y reencontrar, en otros, a los amigos que pudieron hacernos un hueco en sus agendas. Aunque sabíamos que un viernes de finales de mayo, plagado de eventos en nuestra comunidad, podría no ser la mejor opción de cara a la afluencia de invitados, lo cierto es que el día no lo escogimos nosotros: el 27 de mayo del año pasado fue el día en que nos dejó el Padre Damián de Oseira, estandarte del patrimonio cisterciense a través de su faceta de investigador y escritor, y quisimos ser estrictos en la fecha de su homenaje.
Poder contar con la intervención de personalidades como José Carlos Valle o Ermelindo Portela nos animó a intentar hacer el mejor trabajo de organización posible, algo que no nos corresponde a nosotros valorar, si no a los que asistieron. Esperamos que se marcharan satisfechos en ese aspecto.
Aunque es imposible nombrar a todos los que vinieron y los que nos animaron desde la distancia, queremos agradecer especialmente a: Nava Castro, Directora de la Axencia Galega de Turismo por sus apalabras y apoyo; a Alejandra Seara, Gerente del Consorcio de Turismo de la Ribeira Sacra; al Sr. Obispo de Ourense, Leonardo Lemos; a los Amigos del Románico y sobre todo a Augusto Guedes; a la asociación Tesouros de Galicia y en concreto a su presidente Javier Rodríguez, a la Asociación Cultural de Amigos del Monasterio de Oia (ACAMO), en concreto a Noelia, Javier y Rory; a Jose Luis Barreiro Rivas, presidente de la Asociación de Amigos del Monasterio de Aciveiro.
Agradecer también el apoyo recibido de la Carta Europea de las Abadías Cistercienses y el esfuerzo del desplazamiento desde otros países: Jean Louis de Lagausie, Vicepresidente de la Carta y representante de la Abadía de Fontfroide en Francia; Irene Bien, representando a la abadía belga de Herkenrode, a José Pont, por el Monasterio de Piedra en Aragón; a Walter y Domingas Osswald del Monasterio de Sao Cristovao de Lafoes en Portugal...
Debemos hacer mención destacada a nuestros patrocinadores: Bodegas Pazo Casanova, de la denominación de Origen del Ribeiro, a través de la cual quisimos destacar la vinculación importantísima de la viticultura con los monjes cistercienses que implantaron el cultivo de la vid allá donde se asentaron.
Al Concello de Montederramo y la Deputación de Ourense.
Por supuesto a los que pudieron venir de nuestro Comité Científico como Ana María Tavares desde Portugal, y a nuestros ponentes de excepción José Carlos Valle, Ermerlindo Portela y José Albuquerque.
No podemos dejar de nombrar a los que forman ACIGAL, a las personas que con su esfuerzo constante hacen que todo esto sea posible: Yoani Jartín, Miguel Asorey, Anxo Bernárdez, Andrés Feal y Alberto Cortizas, Carlos Gómez, Javier Alonso, Cristina Francisco, Juan Martínez, Ana Quicler y Sarah Barbará.
Y por último agradecer a nuestros socios y anfitriones, Antonio Rodríguez y Elvira González del Concello de Montederramo, gracias por hacerlo fácil.
¡Seguimos trabajando!
